Lidia
Rita Bonilla Delgado
El
mismo PRI de siempre se vio el pasado fin de semana en el Sur de Tamaulipas, el
acarreo masivo, el dispendio de recursos para demostrar “musculo” en cada uno
de los tres municipios.
Mentira que haya cambiado en algo el coloso tricolor,
los mismos vicios de siempre hacen más
latente el gatopardismo que en cada proceso electoral se da, diría mi
madre “es la misma burra pero revolcada”;
el acarreo al por mayor como si fuera ya un acto de la campaña
constitucional donde se miden las fuerzas opositoras al interior. Triunfo como
siempre el sometimiento a los intereses “superiores” de la clase política que
no, a los del pueblo; la disciplina se impuso sobre lo pactado que se
venía ya tramando, tejiendo desde hace dos años
Y
el abanderado tricolor en su calidad de precandidato llego “victorioso” de una
pugna que nunca se dio, con un discurso
sin enjundia, ni brío,
escudándose en no hacer caso de “dimes y diretes”, sin aclarar
acusaciones y señalamientos en torno a sus vínculos que dicen lo ligan con el crimen organizado y de los jefes de su
pasado como lo señala su más férreo contrincante. Simplemente calla y sonríe haciendo
alarde de sus 35 añoscomo militante del REVOLUCIONARIO; 32 como servidos
público y 16 dedicado a Tamaulipas,
mientras para la operación cicatriz entre los seguidores de quienes simulaban
“el juego democrático interno” les pregona que “En Tamaulipas cabemos todos, es
muy grande nuestro estado… que va a ser incluyente y nadie se quede fuera”.
Tres
eventos masivos un solo discurso insulso,
cambiando solamente nombre de actores y lugares Tampico, Altamira, Madero,
Gustavo, Armando y Mario, tan igual que en el último ya ni siquiera se cuidaron de borrar de la lista de invitados a la diputada local de extracción
aliancista, quien no estuvo presente.
También presentó en los tres municipios a su esposa y una de sus tres hijas. Si
acaso en Altamira cambio un poco los decires del “precandidato” gracias a la
enjundia que le imprimió a su discurso el representante del sector campesino
quien preciso que “Tamaulipas no son solo construcciones sino que también está
lleno de surcos y caminos de tierra”, arrancándole el compromiso de que
Altamira será primero.
En
los grandes templetes lucieron las
mismas caras de siempre, los mismos personajes que mal gobiernan aún en cada
uno de los municipios y de los que la población ya está harto por su
estulticia, siendo más latente en la urbe petrolera, donde a unos metros del
punto de encuentro de los priistas una gran laguna de aguas pestilentes es la
calle que flanquea la Unidad Deportiva; mientras los petroleros apurados con
mientras gritaban sus “porras” buscaban
al tomador de lista para que los anotara de presentes, algunas mujeres
oficinistas de la ex gran industria nacional
comentaban igual sobre el paso de lista,
que para consuelo de ellas les
dijeron que con la foto que les tomaron era ya suficiente. Las calles
“recién” pavimentadas bajo el gobierno
del ahora diputado federal petrolero lucen deterioradas y aún no acaba su
trienio, mientras en redes sociales se evidencian las millonarias mansiones y
residencias locales y allende el Bravo.
Aquí
en Madero a pesar de que intervino con un buen discurso la representante del
sector femenil, amén de ser la primera en participar y exponer el apoyo del
sector en su gira, no logro mención en
el rígido discurso del abanderado; no así,
se tomó la molestia de recordar el nombre del joven que hablo represento al dirigente del PRI municipal,
quien por cierto se equivocó. Dejando un silencio que para hacerlo menos pesado
ovacionaron.
Al
inicio de la precampaña el chapulineó se ha vuelto evidente, diputados locales
y federales alcaldes, regidores y síndicos han pedido licencia y se han
sumado en busca de otro hueso,el que
estaban royendo esta por acabarse y tienen que posicionarse, nada les importa
el gasto que se hizo para alcanzar su posición, total no fue su dinero, sino el
dinero del pueblo, de todos los mexicanos que,
a través de las instancias electorales se les hace llegar a los
partidos, a las campañas y a los
candidatos. Igual algunos funcionarios
han “renunciado” también para lo mismo.
En
Altamira situación similar sucede, aunque
más sutil, a últimas fechas se ven obras, pero el acarreo al acto masivo que
tuvo lugar en los terrenos dela Asociación Ganadera Cebú fue insospechada,
tratándose como se trataba de una reunión con delegados, no con acarreados obligados militantes, más de treinta camiones fueron estacionados
no como en los eventos oficiales, en los
terrenos del lugar sino casi un
kilómetro más adelante. Los operadores políticos los mismos de siempre,
agazapados en las diferentes nóminas de los diferentes niveles de gobierno. Lo
que hacen que la ley electoral solo sea esgrimida como parapeto, porque es
mentira que se cumpla, total, son los mismos a quienes les toca hacerla cumplir
¿O no?
En
Tampico el área de velerías de la laguna
del Carpintero fue el primer punto donde pronuncio el cuasi candidato su
discurso y agradeció la cálida
bienvenida.
A
nivel estatal son 14 mil delegados en los 43 municipios los que tendrán que converger el 28 de febrero
en la capital del Estado para aclamar su candidatura por lo que eventualmente
no sería necesario tanto despliegue de recursos y de gente. Sin embargo, esta
movilización es un termómetro para medir la fuerza de los que pretenden las
candidaturas locales, ya sea a las
presidencias municipales o a las
diputaciones locales.
quecosahedro@hotmail.es
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