Tiempos de Guerra
Feliciano Rangel Montoya
18/11/2013
Cuando Jamil Mahuad, fue político de
bajo peso, siempre fue respetado en Ecuador,
país sudamericano, pero una vez ingresando a las grandes ligas de la
grilla nacional, la cosa cambio, primero fue agredido siendo diputado federal
en el parlamento nacional, por los familiares del presidente Abdala Bucaram.
Años más tarde se convierte en
ministros del Trabajo de la nación, y después alcalde de Quito, unas de las
urbes más grandes del mundo, dos veces consecutivas y dicen los ecuatorianos que fue un alcalde ejemplar. Pero
desde la capitanía ecuatoriana, organizo las protestas del mismísimo presidente
Bucaram, y al final este último fue derrocado.
Mahuad, fue electo como presidente de
Ecuador, para el periodo 1998-2002 y no duro más que 10 años, no resulto ser lo
mismo dirigir a una ciudad, donde si miras para arriba hay culpables de tus errores,
que dirigir a un país, donde el único responsable eres tú mismo, ni modo que le
achacara los males a los gobernador o alcaldes del manejó de la nación.
Natura no le dio para más, y la
incapacidad de su capacidad llego a su fin, fue derrocado en 1999 y al exilio a
Estados Unidos, dejando a Ecuador hundido en la peor crisis económica de su
historia y en banca rota.
Muchos aspectos se han dado en el
mundo, George W. Bush, después de ser gobernador texano, le dejo a Obama un
país en ruinas; José Luis Rodríguez Zapatero, al presidente Rajoy, le hizo lo
mismo.
En México, ha quedado claro, que no
es lo mismo gobernar un estado, que la nación completa, para Fox, no fue lo
mismo Guanajuato que México, y para Enrique Peña Nieto, no está resultando lo
mismo el Estado de México, que la nación de México.
Reforma hacendaria, que salió
miscelánea y a modo de los partidos
políticos, dejando de lado, el poder y la decisión de los ciudadanos, la
reforma educativa tiene a la capital paralizada con tanta marcha y protestas de
los maestros del CNTE.
Por si fuera poco, ahora viene la
madre de todas las batallas legislativas, la reforma política y la reforma
energética, sin lugar a dudas una es el candado de la otra.
Y si se logra la reforma educativa del
presidente, eso querrá decir, que el presidente cedió en la reforma política y
viceversa. Porque no es lo mismo un estado que la nación completa y más cuando
natura no da.
De aquello y
lo demás…
El talento al parecer ya se acabó en
Matamoros, ahora importado desde chilangolandia, llegara al parecer un gerente
de la JAD, el organismo operador de agua y alcantarillado de Matamoros.
No dudamos de su capacidad, sin
embargo creo y estoy seguro que talento hay en Matamoros, para dirigir el
organismo de agua potable. No hay necesidad de importar y en ninguna área de
eso seguro estoy.
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