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| Feliciano Rangel Montoya |
Oligarquías
Encabronadas
Feliciano
Rangel Montoya
Enero
10/2017
Nunca antes se había sentido tanto
odio y desprecio hacia un presidente como el que hoy tenemos los mexicanos,
Enrique Peña Nieto, es quizá, el mandatario más vapuleado, cuestionado,
acusado, y vituperado, que ningún otro jefe de estado en el mundo.
La oficina de comunicación social,
que en primer orden manejo David López, (hoy diputado federal) nunca supo
comunicar realmente, las acciones y hechos de gobierno. El Distrito Federal, se
transformó en una Tolucota, pero con afectación a más de 110 millones de
mexicanos. Pero eso no es el enojo, el fondo va mas allá, de un simple aumento
a gasolinas; como dice, Friedrich Wilhelm Nietzsche, “la forma, es fondo”.
El fondo, es que se le han quitado, los subsidios a los combustibles y
energéticos, y ahí las oligarquías eran las beneficiadas. Argumentos le comento
uno, y ya que se rasgan las vestiduras con la afectación a los más pobres,
sobre todo, algunos aprendices de socialistas.
Por ejemplo, en una cosecha, una tractor gasta diario unos 250 litros de
diésel, trabajando duro, si lo multiplica por 15 días, le da 3750 litros de
combustible, y el subsidio era de 2 pesos aproximadamente, entonces el gobierno
le daba al agricultor, un subsidio de 7500 pesos en combustible, si ese mismo
escenario, lo trasladamos a una flotilla de tráiler, el subsidio aumenta
exponencialmente, un tracto camión gasta 2.5 litros por kilómetros, es decir,
en un viaje de 500 kilómetros, gastaría 250 litros. Es decir, el gobierno
subsidiaba de ese flete, 500 pesos, y si lo multiplica por 2 serian 1000 por 52
semanas equivaldría, a 52 mil pesos anuales en cada tracto camión, equiparable
a un tractor agrícola, la diferencia es de 44,500 pesos, eso quiere decir, que,
el subsidio a los empresarios es casi el 80% de los combustibles, ¡ahora entiende
la razón del enojo de los empresarios ¡
Por eso las oligarquías, no firmaron el acuerdo con el presidente de la
república, porque ellos son los que han salido afectados, le han quitado el
subsidio, y eso es inaceptable, para ellos que siempre han vivido han tenido
privilegios.
Las manifestaciones, han sido recurrentes, las pacíficas, son atendidas
y organizadas por ciudadanos, los saqueos y pillerías, esas tienen un fondo más
devastador, y tratan de causar el pánico y el caos, con el único propósito de
desestabilizar a este país, y con ello provocar, el rio revuelto, donde siempre
la oligarquía sale ganando.
De aquello y lo demás…
Ahora que está de moda, el gasolinazo
y que muchos factores se conjugan para un choque de trenes, muchos aseguran que
el antídoto, de Donald Trump, se llama Carlos Slim, y nada de eso sería cierto,
si supiéramos que los empresarios son, buenos políticos.
Empresarios metidos a políticos hay
muchos, todos con finales desastrosos, en México, por ejemplo, Eduardo Bours
Castelo, Sergio Estrada Cajigal, Benjamín Clariond, Miguel Alemán Magnani,
Guillermo Padres Elías.
A nivel internacional, Hamill Mahud, de
Ecuador, Michael Rubens Bloomberg ex alcalde de Nueva York, Fernando De la Rua, en
Argentina, y todos ellos con historia y finales desastrosos.
Así es que si los mexicanos, queremos
un cambio, y el antídoto contra Trump, un consejo simple, no vaya de compras al
Valle de Texas, para que vea cuanto tiempo aguantan las empresas sin el dinero
de los mexicanos.
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