Luis Pazos
Legisladores priístas advirtieron que para el 2012 el Instituto Mexicano del Seguro Social no tendrá fondos para enfrentar su sistema de pensiones. También denunciaron la crítica situación económica en que se encuentra PEMEX y afirmaron que de seguir en las mismas condiciones va hacia la quiebra. Esos legisladores parece que tienen una memoria muy corta, pues olvidan que la crítica situación económica de esas instituciones se engendró el siglo pasado con los gobiernos priístas.
Y en este siglo son los legisladores priístas, quienes han mediatizado las reformas para sanear y darle vialidad a esas instituciones. En el gobierno de Vicente Fox, Santiago Levy, en ese entonces Director del Instituto Mexicano del Seguro Social, reconocido internacionalmente por su capacidad, presentó un plan para sanear sus finanzas, pero el sindicato de esa institución se opuso y los legisladores priístas tampoco la apoyaron. Presentaron una “reformita” a mediados del 2004 que no sirvió para sanear al IMSS.
En el caso de PEMEX, desde el Gobierno de Fox se presentaron reformas que no han apoyado los priístas. El Presidente Calderón en el 2008 envió al Congreso una iniciativa que abría las puertas a fuertes inyecciones de capital a Pemex y a la explotación de los yacimientos en el Golfo de México, conjuntamente con quienes tienen la tecnología; sin embargo, los priístas, que ahora denuncian la crisis en PEMEX, fueron quienes en noviembre del 2008 convirtieron la Reforma presentada por el Presidente Calderón en una “reformita” que de poco sirve para hacer productivo a Pemex.
Con el PRI se cumple el dicho de que “crean el coco y después se asustan”; pero si realmente es sincera su preocupación por PEMEX y el Seguro Social, deben apoyar las reformas que ha presentado el Ejecutivo y que ellos han obstaculizado, como lo demuestro en el libro “Quién manda en México”.
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