Juan Edy Pintor |
Los escurrimientos de auténticos liderazgos
Febrero 19/2017
Los escurrimientos y la permeabilidad de los liderazgos de los
diferentes partidos hacia la inminente e inaplazable ola de éxito electoral que
acompañará al movimiento político Morena en las próximas elecciones, es un
fenómeno que no podrá evitarse.
Liderazgos en el estado que
representan más de 100 mil votos como el de Carlos Cantú Rosas y Enrique Rivas
Cuellar en el municipio más importante-electoral y económicamente hablando-,
que es Nuevo Laredo, son un gran activo para el PAN o para cualquier otra
organización política. Se viven tiempos de cambios radicales en donde las
cabezas reales de cada localidad no se deben de dejar sueltas.
Líderes fronterizos como el esposo de
la principal asesora de la presidente Maky Ortiz en Reynosa; Oscar Luebbert y
el indiscutible imán político de Magdalena Peraza Guerra en Tampico son cosas
que no se deben desestimar.
Además de la familia Garza Cantú en
donde la determinación la tiene don Ramiro Garza Cantú y que influye hacia los
cuatro puntos cardinales en el estado y el país.
No pasemos de largo por la capital de
estado en donde no hay nada que hacer ante el dinamismo del bonachón y diestro
operador político convertido en presidente municipal, Oscar Almaraz
Smer-recordemos que ya sacó exitosamente las últimas cuatro o tal vez cinco
elecciones-.
La sinergia entre el presidente
Chuchín de la Garza y Manuel Muñoz Cano en Matamoros es insoslayable.
En rio Bravo, el presidente Juan
Diego Guajardo Anzaldúa podría eventualmente llevar una alianza con la
carismática familia Melhem Kuri y su descendencia. Tienen buena imagen, además
de Edgar, se encuentran también Zacarías, Chuy y hasta el mismo Mussy Mehem
Kuri.
En Altamira a la hora que se les
antoje, “El gordo” Genaro de la Portilla y Juvenal Hernández Llanos conservan
la autoridad en la grilla ejidal, que es donde están los votos en Altamira.
No podemos dejar de tomar en cuenta
sobre el génesis del nuevo liderazgo y grupo político en la zona conurbada del
sur de Tamaulipas y en donde, las riendas descansan en la diestra de la
revelación política que es representada por el incansable presidente municipal
Andrés Zorrilla Moreno en aquel pequeño gran rinconcito llamado Madero-Miramar.
De los oportunistas y arribistas que
ya abandonaron el barco priista en aras de acomodarse en el movimiento MORENA,
solo nos queda aludir a aquella consigna política: “Las ratas son las primeras
en saltar del barco”.
El ambiente político en el estado
está enrarecido y, el horno, AHORA SI está para bollos…
Cualquier alianza o deserción, cabrá
en el nuevo terreno electoral que se ha conformado como una especie de caldo de
cultivo para ello.
Los maridajes estarán dentro de unos
meses a la orden del día.
El año electoral comienza en
octubre y el 2018 ya arribó.
No hay comentarios:
Publicar un comentario