Maestro: Luis Pazos |
La oposición de Cuauhtémoc Cárdenas y de Andrés Manuel López Obrador a
una reforma energética que permita la asociación de Pemex con particulares,
aunque sus intenciones puedan ser honestas y sinceras, beneficia a las mafias
sindicales, de contratistas y funcionarios que han saqueado Pemex por varias décadas.
En esos dos personajes se cumple el dicho “Nadie sabe para quién
trabaja”, o a lo mejor lo saben pero en una actitud protagónica y para
aglutinar a su alrededor a la izquierda, le hacen el juego a mafias, las que
serán beneficiadas sino se concreta una reforma estructural, que mediante
cambios constitucionales permita la asociación con particulares, aumente la
inversión, la eficiencia y la productividad en Pemex.
Pareciera que el señor Cuauhtémoc Cárdenas, cobijado en el apellido de
su señor padre, no conoce bien la reglamentación que dejó, en la cual permitía
concesiones a particulares. Los cambios posteriores que impidieron la
asociación con particulares fueron para beneficiar a contratistas, que
coludidos con el sindicato o funcionarios, sin correr ningún riesgo, por medio
de empresas fantasmas y sin sacar un solo barril de petróleo, se han llevado miles de millones de dólares.
López Obrador sabe que a sus seguidores les urgen banderas para
aglutinarse y ven en el estribillo “No a la privatización de Pemex” una fuente
de simpatizantes para consolidar su nuevo partido político “MORENA”.
Los argumentos que esgrime Cárdenas parten de premisas falsas, de una
supuesta venta de Pemex y de la manipulación de los conceptos de nacionalismo y
soberanía, al igual que los utilizó el sindicato y los contratistas, para
evitar que se permita, como en el 99% de los países petroleros, la asociación
con empresas particulares, con riesgos y utilidades compartidas.
Los únicos perjudicados de la asociación de Pemex con particulares son
los que siempre se han opuesto a los contratos de riesgo, que implican pagarle
solo a los que extraen petróleo. Los contratos de riesgo, con diversas
modalidades, acabarían con las empresas fantasmas, los pagos de Pemex a
empresas que no aportan nada, los sobreprecios,
las comisiones por favorecer licitaciones, reducirían la corrupción y la
asignación de recursos millonarios a quienes cobran sin producir, ya sean
contratistas, personal administrativo o sindicalizado.
Sigue los Comentarios del Profesor de Economía Política Luis Pazos
en twitter: @luispazos1 o escríbele al correo lpazos@prodigy.net.mx
No hay comentarios:
Publicar un comentario