Feliciano Rangel Montoya |
La política, una línea
delgada, efímera y filosa
Feliciano Rangel
Montoya
Nov.18/2016
Los
liderazgos exógenos, efímeros, han dejado de ser parte del statu quo mexicano,
¿pero por qué? Lo que ha pasado en Quintana Roo, Chihuahua, Veracruz,
Tamaulipas, Durango y todo aquel territorio, que fue gobernado por la
autollamada, “nueva clase política mexicana”.
Esa clase política, a la que el
presidente Peña Nieto, califico en su momento, como valiosa. Pues esa misma
clase política, de Duarte, de Borge, de Herrera, de Padrés, tiene al país,
sumido en su más severa crisis política y de credibilidad.
El día de ayer, se dieron a conocer
datos, de cuantos terrenos había regalado y obsequiado a amigos, familiares y
compinches, Roberto Borge, ex gobernador de Quintana Roo, una extensión, que
equivaldría, al tamaño de Cancún, con zona hotelera y urbana, de ese tamaño es
el desfalco, al erario público del estado peninsular. Porque estos terrenos,
son o eran propiedad del estado, y listos para el desarrollo turístico, que se
genera en la entidad. 10 mil hectáreas, una cosa de locos.
Pero no tan lejos, dirían en el
rancho, aquí también se armó el escándalo, el viejo refrito de Tomas Yarrington
y Eugenio Hernández Flores, que el mismo ex gobernador
(retirado…juar…juar…juar) Egidio Torre, acepto, haberles mandado guardias para
su seguridad, a donde a sus casas, por supuesto.
Y el nuevo gobierno del cambio,
descubrió, el hilo negro, y retiro los guardias, asignados a estos dos
personajes, y de pura casualidad estos elementos, fueron enviados a San
Fernando, como parte de la policía ministerial.
También, se dice, que Eugenio y
Tomas, no podrán pisar suelo tamaulipeco, porque serán detenidos, y enviados a
Estados Unidos, para que allá paguen sus delitos. Lo paradójico es que, en
México, no tienen delito alguno, o denuncia ante la autoridad mexicana. Y de
ser así, como marca la constitución, ningún individuo puede ser detenido en su
transitar por el territorio nacional, si este no tiene delitos en nuestro país,
al menos que las autoridades gringas hallan solicitado la detención, con fines
de extradición.
Así las cosas, la política, se rompe
por lo más delgado, y ya que anda el gobernador, con el tema de los ex
gobernadores, no se le olvidaría nombrar a alguien, no sé, alguno, que tiene
poquito de haberse retirado de la política. Que por cierto vive en San Pedro,
en un lujoso barrio, en el estado de Nuevo León.
De
aquello y lo demás…
Mire lo que son las cosas, el
liderazgo del PRI, en Tamaulipas, ha empezado a calentarse, y hablando de ex
gobernadores, uno de los que busca esa posición es Manuel Muñoz Cano, apoyado
con todo y por todo, por Eugenio Hernández Flores.
Y el retador, se llama Alejandro
Guevara Cobos, que, desde el CEN del PRI, busca los consensos, para ser el
nuevo líder del priismo en Tamaulipas. Ya los dos se reúnen con grupos
políticos en las diferentes ciudades del estado.
Sin embargo, la lucha va más allá, la
disputa es por seguir como siempre, o tener la posibilidad de renovarse, hay de
dos sopas, y los priistas tendrán que ponerse de acuerdo.
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