Candelero

Antes que nada y nadie, está la investidura del Presidente

¿Será que con austeridad se haga más con menos? 

Abraham Mohamed

             Sin descuidar las tareas y responsabilidades cotidianas, cuatro son los temas prioritarios que en éste “Mes de la Patria” traen en jaque al Gobierno priista del Presidente Peña Nieto:

1.- El Tercer Informe.

2.- El paquete hacendario con el Presupuesto de Ingresos y Egresos entre otros rubros.

3.- El caso de los 43 estudiantes de la Normal de Ayotzinapa desaparecidos y

4.- Concretar sus 12 Reformas Estructurales en ésta segunda mitad de su régimen para proteger y mover a México hacia el desarrollo sostenido y no caer en recesión en la que ya están varios países de todos los continentes, por la crisis económica y financiera que ha ocasionado la nefasta política neoliberal impuesta por los poderosos consorcios que dominan este mundo globalizado.

            Puedo decirle sobre el punto número 1, que el Presidente, por lo que ha expresado públicamente, está en la mejor disposición de corregir errores que se hayan cometido en éstos pasados 3 años de gobierno, al considerar que solo así podrá recuperar la confianza que los ciudadanos han perdido en las instituciones, cosa que él mismo también acepta. Por eso adelanto -siempre y cuando la situación política no se complique- que retomando el rumbo democrático, sus próximos Informes de Gobierno los rendirá como lo mandata la Constitución, ante el Congreso de la Unión y no en espacios confinados, aunque sea en Palacio Nacional como lo ha hecho igual que sus antecesores panistas, con invitados seleccionados a modo.

            Vale que usted con una sonrisa sardónica diga: “ya lo veremos” y en eso estoy de acuerdo por la desconfianza prevaleciente, pero por lo que sé de muy buenas fuentes, le añado  que es el Presidente quien tiene toda la intención de rendir sus próximos Informes de Gobierno que le faltan, con toda dignidad republicana, en el Palacio Legislativo. Así que…”ya veremos”. (Con la pena de que, valga la comparación por el nivel, ya se le haya adelantado el Jefe de Gobierno del DF, Miguel Angel Mancera al anunciar que él sí está dispuesto a debatir en su Informe).

            El punto número 2 contiene gran efecto social. Se trata de que no solo “el Gobierno tendrá ahora que apretarse el cinturón” como expresó el Presidente; yo le digo que se había tardado para tomar esa decisión, porque la inmensa mayoría de los mexicanos ya trae tan “apretado el cinturón” que hasta los ojos se les saltan y, si para el próximo año los recortes van a generar más desempleo, y la pobreza en consecuencia va a aumentar, súmele cuando menos otros dos millones a los 55 millones que no tienen nada que comer con todo y la mentada Cruzada Nacional Contra el Hambre.

            Pero veamos hacia el 2016:

            El Presupuesto de Egresos será de 4 billones 694 mil 677 millones de pesos.

            El recorte al gasto bajará de 135 mil millones a 97 mil millones.

            El gasto programable se ajustará en 221 mil millones que es el 1.15% del PIB.

            El precio del barril de petróleo se calculó en 50 dólares estimándose una producción de 2.47 millones de barriles diarios.

            Se propone disminuir el déficit público del PIB del 1 al 0.5%.

            Proyectan que México crecerá entre el 2.6 y 3.6%.

            Calculan el tipo de cambio de 15.90 por dólar apoyado con ventas de     Banxico donde por cierto, por conveniencia, “porque lo ha hecho bien”, se mantendrá en el cargo como Gobernador a Agustín Carstens otros seis años.

            Se dice que la inflación será del 3% en todo el próximo año.

            Hay que apuntar que el recorte para las dependencias que dependen del Ejecutivo Federal será de 120 mil millones. Las más afectadas son:

            La SCT a la que le restan 33 mil millones de su presupuesto; a la Sagarpa le bajan 18 mil millones; a la SEP 15 mil millones; a Salud le restaron 10 mil millones; el Conacyt tendrá 786 millones menos para gastar, aclarando que las Secretarías menos “recortadas en su gasto” son Defensa, Marina y Sedatu.

            Por otro lado destaca el recorte a la partida de Provisiones Salariales y Económicas por 35 mil millones para quedar en 102 mil millones en 2016.

            Aunque suene extraño, en medio de estos recortes, sí se incrementaron algunas partidas como las Aportaciones a los Estados que aumentó 1.1 % equivalente a 6.9 mil millones y las Previsiones y Aportaciones para los sistemas de educación suben 3.6% que representan 50 mil millones de pesos y al Instituto Nacional para la Evaluación de la Educación se le destinan 220 millones más para ejercerlos en el 2016 pues pasa de mil 20 millones a mil 240 millones, lo que representa un incremento del 21.5%.

            Y agárrese, tanto al Poder Legislativo –Cámara de Senadores y Cámara de Diputados con la Auditoría Superior de la Federación- dispondrán de buen incremento presupuestal que llega a 703 millones de pesos, asignados así: para Diputados su gasto será 3% mayor al pasar de 7 mil 339 millones del 2015 a 7 mil 559 millones en 2016; para Senadores el incremento será de 10% al subir de 4 mil 19 millones a 4 mil 421 millones mientras que a la ASF se le asignaron 2 mil 120 millones que representan el 3.9% de incremento comparado con el presupuesto del 2015 que fue de 2 mil 39 millones.

            Ufff…. ya no digamos el incremento al Poder Judicial que registra una alza del 31.9% al pasar de 51 mil 769 millones en 2015 a 68 mil 116 en 2016, distinguiéndose por ser el más crece en recursos.

            El Punto 3 que es el Caso Ayotzinapa, le brinda la oportunidad al Presidente Peña Nieto de demostrar plenamente su sensibilidad como ser humano y como gente de poder dispuesto a exigir se investigue y se haga justicia, al recibir –como sin duda lo va a hacer- a los padres y familiares de los 43 jóvenes normalistas que no aparecen y en cuya ausencia se ven involucrados autoridades de todos los niveles de gobierno y policías federales, estatales, municipales y militares.

            Para antes de los días 26 y 27 de éste Septiembre en que se cumple un año de que los estudiantes desaparecieron, el Presidente Peña Nieto habrá de reunirse con los familiares de ellos y ahí les anunciará, sin duda alguna, su disposición para que el caso se esclarezca, que se profundicen las investigaciones para que los jóvenes aparezcan con vida o desafortunadamente recuperen sus restos si es que fueron asesinados, como se presume, para darles cristiana sepultura, y que se descubran a los autores intelectuales y materiales y a los funcionarios que les sirvieron de cómplices al solapar su culpa falseando las investigaciones. Sin el manto de impunidad, a todos hay que castigarlos aplicándoles rigurosamente la Ley, trátese de quienes se trate, porque antes que cualquiera de ellos, está la investidura, la dignidad y la respetabilidad del señor     Presidente de la República.

            Y creo que el Presidente Peña Nieto está muy consciente de ello, lo cual, además -y es mi muy modesta opinión- contribuirá muchísimo a la recuperación de la confianza en las instituciones lo cual llevaría a la reconciliación nacional.

            El punto 4 habrá de arrancar el 15 de Noviembre fecha límite para que el Congreso de la Unión apruebe el Paquete Hacendario –los Presupuestos- y entonces se haga el anuncio formal sobre la nueva dinámica de las Reformas Estructurales el 1 de Diciembre en que oficialmente inicia el Cuarto Año de Gobierno del Presidente Peña Nieto.

            Y a partir de esa fecha, lo que resulte o no, en beneficio o perjuicio del Presidente y su Partido el PRI, eso se reflejará en las elecciones por las Gubernaturas, Congresos locales y Alcaldías que habrá el próximo 5 de Junio del 2016 en Aguascalientes, Chihuahua, Durango, Hidalgo, Oaxaca, Puebla, Quintana Roo, Sinaloa, Tamaulipas, Tlaxcala, Veracruz Zacatecas y Baja California donde solo se elegirán los 5 Ayuntamientos y los 16 Diputados de mayoría relativa y los 9 plurinominales. (Desde ahora le digo que el PRI espera mantener 9 de esas Gubernaturas en juego y va por Oaxaca, Puebla y Sinaloa, más lo que logre de Alcaldías y diputaciones en Baja California que gobierna el PAN.