Polvorín
José Ángel Solorio
Martínez
La candidata a la diputación federal por el II Distrito con cabecera en
Reynosa, Tamaulipas, María Esther Camargo Luebbert, será sentada ante el
banquillo de los acusados en la Agencia Segunda del Ministerio Público Federal
por la presunta transgresión de la ley electoral.
El fiscal, inició con filo.
Respondió la PGR, como pocas veces.
En primera instancia, citó a comparecer al acusador Juan Manuel
Rodríguez Nieto quien funge como Presidente del Comité Directivo Municipal del
Partido de la Revolución Democrática (PRD) en Reynosa. El ex diputado, ratificó
su narración de hechos sobre las acciones de Camargo Luebbert “por utilizar
eventos oficiales para promoverse”.
El abogado del Sol azteca en Reynosa, Alfredo Castro Olguín acompañó a
Rodríguez Nieto a la fiscalía.
Mal inicio para la candidata priista.
Es obligado también, la comparecencia de varios servidores públicos del
Ayuntamiento reynosense, que sin duda clarificarán el papel que la candidata
del PRI jugó en los actos de gobierno.
El error de Camargo Luebbert, está precipitando la ruptura de vigorosos
actores políticos de la localidad que han sido enlodados innecesariamente por
la desesperación de la ex pareja presidencial.
Las pruebas que presentaron los perredistas ante el Fiscal, contemplan
fotografías, videos y actas de una sesión del Ayuntamiento en la cual se plasma
la inconformidad de regidores del PRD, del PAN e incluso del PRI ante la
prepotente presencia de la aspirante tricolor a la diputación federal.
Costosa pifia.
Muy costosa.
Ahora, en lugar de andar promoviendo el voto entre la ciudadanía, la
priista deberá defenderse de la PGR que le dio para adelante a la denuncia
perredista y del PRD que quiere verla tras las rejas.
¿Ayudará a la candidata, -y a su campaña- una foto suya declarando ante
el Fiscal Federal?..
Ya lo dijo la sabiduría popular:
La que mal empieza…
…mal acaba.
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